Gestionando la frustración
Llegado un momento te planteas que quizás tu manera de plantear el proyecto no era la adecuada y buscas explicaciones. Te esfuerzas en entender mejor y seguir buscando LA solución. Pasa el tiempo y muchos de los proyectos te dejan un sabor como mínimo agridulce. La sensación de que podría haberse llegado más lejos.